Y ya no hay

Ulises quiso suicidarse, de Antonio no se nada hace un año, se lo comió la cárcel, se lo comió la calle, la misma que mato a Alexander... -Se enfoca una esquina oscura, empieza a sonar un piano tenue, sientes fiebre en el pecho, fiebre de esa que contamina y te hace gotear los ojos- Andrea tiene dos hijos preciosos, Marcela tiene un novio hace años, todas las demás regresan...
A veces veo a Sergio y por triste que suene con Manuel es con quien mas hablo y hablo cada semana... y si eso.
Supe que Arturo habla bien de mi.
Pise Rusia, España, Escocia, Italia, Chile, Ecuador, Peru y Brasil, mas de medio México, después recibí una disculpa de mi padre con una carta que escribí de niño junto a toda mi dislexia, a mi familia no la convenzo aunque tengo hasta canciones que hablan de mi, una la escribió Alfredo, quizá cuando conquiste el mundo entero, quizá cuando me cabe la ultima pared de este infierno...
quizá cuando ya sea muy tarde con las hojas amarillas del cuaderno...
Vivo solo en una casita junto a mi perro, me rompió una diabla pero esta vez me rompió en serio. Le ofrecí mi refugio como suyo, me miraba como a un loco, me comparaba con el nuevo, le enseñe lo que tanto guardaba, cortándome con lo oxidado de la armadura que no me quitaba, sangrando para mostrar lo que no había visto el sol hace tanto y ahí me quede, totalmente descubierto, en medio de ese parque, debajo de esa farola, con la rabia en la boca y el amor echo trocitos.
No me queda hambre alguna, pisotearon mi fuego, me muevo por instinto, hace tanto que no siento na...
Como se fue Gustavo y Arturo, y Paco, peor se fue Tania y Karla y Eduardo...
Hace meses que no veo a Sandra y no se de quien mas seguir hablando...
No hay nadie mejor que yo y ya no hay nadie para contarlo...