10.25.2016

EL CUADRO COMPLETO

¡¿Fijarse en el cuadro completo y no en el detalle?!
Soy un perfeccionista acerrimo, siempre he defendido los pros de ser detallista y centrarse en minuciosidades. Una noche drogado viendo la película biográfica de mi artista favorito llegue al lavabo y al observarlo atentamente porque, estaba drogado. Comencé a fijarme en los tonos que necesitaría para pintarlo y fue facilismo tenerlos en mi cabeza en cuestión de segundos porque, estaba drogado y realmente no le estaba prestando atención a nada solo pensaba que si. Estaba viendo el cuadro completo viendo la imagen en mi cabeza separando tonos de los diferentes elementos colocados sobre el lavamanos: pasta de dientes, dentífrico (para no poner que había: dos dentrificos (no me gusta como suena(sigo drogado por eso pongo paréntesis adentro de otros hablando de otro temas), papel higiénico, ligas para mi cabello y un etcétera de productos.
Y esa observación me llevo a pensar en que quizá fijarse en el cuadro completo no sea tan mala idea y menos en mi trabajo que, gracias a un sin fin de circunstancias, ayuda de gente que estimo y me estima espero, mucha suerte, quizá mucha ayuda de algún ente divino al que no me corresponde descifrar ni etiquetar ese es su pedo y en caso de que no existiera un chingo más de suerte,  amor por no trabajar y sobre todo un putero de trabajo personal (si, ya se), es pintar.
Decidí aceptar la idea, pero de repente cuando había vuelto a ponerle play a mi película me vino un pensamiento a la cabeza: ¿estas completamente seguro de querer fijarte en el cuadro completo con todo lo que significa?
Si.
Y esto me llevo a pensar que quizá la maldición y el don iban de la mano. Quizás desde pequeño siempre he sido muy fijado en los detalles, tan fijado que solo me daba tiempo de observar algunos objetos y memorizar su forma en mi cabeza, por ende al no observar el cuadro completo se perdía de mi atención el cuadro obvio para todos los demás.
Osease que lo que da ese toque distintivo, pienso yo,  a mis pinturas es exactamente lo que me hace sujeto perfecto para la etiqueta de despistado o trastorno por déficit de atención (que pinches culero nombre, yo creo que esa madre trastorna más) al que si aporta mi hiperactividad más no fundamenta del todo.
Osea me fijo un chingo en los detalles y no en el conjunto de elementos, situaciones o personas que estén frente a mi. Me centro en uno o pocos, los que mi inteligencia y atención me den en ese momento. Lo que quizá empezó a evolucionar en que me valiera madre lo que decían, porque no alcanzo a escuchar todo su pedo, me fijo en cada puta palabrita y pienso el significado de cada una de ellas en vez de concentrarme en toda la culera y aburrida diatriba que están soltando, porque si esta culera.
Lo que me puso, justo el día de hoy hace un ratito, a pensar que empezaré a fijarme en todo el cuadro, porque si ayuda, si es saludable social y personalmente porque vivimos en sociedad, y básicamente porque se me antojo. Sin embargo, creo que los veintiocho años que llevo siendo un total despistado y fijándome absolutamente en todos los detalles me han servido para crear una conducta habitual en mi que al ejercer este hermoso oficio seguiré practicando y enriqueciendo con mi nuevo ejercicio mental habitual, ver el cuadro completo.

No se si haya faltas de ortografías muy graves, vi el cuadro completo.

No hay comentarios:

LIBRERO DE RAP DE CAFÉ

Shelfari: Book reviews on your book blog