JARDINES SELENITAS

No espero lo que doy, sé que no podrías. Primero hay que quitarse las cadenas, las cuerdas esas de buscar soltura y considerarte cien por ciento libre para poder entregarte como yo me entrego. No te preocupes cariño ya aprenderás a hacerlo.
Planto letras de fe en tu carácter infértil, cosechando frases que te dibujen sonrisas a escondidas. Este jardinero alunizado, alucinado con este esfuerzo enfermizo de hacerte feliz hasta que duela.
¿Cansada de estar parada en el mismo lugar? Piensa en algo lindo y vuela, ¿no sabes? Ven que yo te enseño, doy clases de vuelos desde que tengo conciencia y esto de evadir a la coherencia, ya lo he transformado en ciencia. No me hables con hechos corazón, estoy harto de la realidad, concentrémonos en nuestras locuras.
Deja que el pasado sea la herida y este presente nuestro la vacuna, el remedio, la cura.
Busco quererte menos y no sé que quieras tú pero yo quiero enamorarme de ti. No te gustaría que mi boca mordiera a otra loca pero, ¿si no te enteras no te importa? No te preocupes mi amor, no hay genio que no se contradiga.
Voy a plantarte las verdades como solo tú y yo lo hacemos. Hablando con el corazón en una mano y en la otra una mano tuya te diré, tu también me hiciste daño pero prefiero estar contigo haciéndote feliz, evitando se repita que causarte un malestar de nuevo. Si no cuenta el pasado, deja en el suelo tanto estorbo que cargas contigo, que solo haces este camino más pesado y lleva solo lo estrictamente necesario, que estoy aquí contigo solo por tratarse de ti que si no, ya me hubiera yo marchado.