Frapuccino Azul Curacao con crema, chispas y mucho ayer, demasiado para mi gusto...
¿Enamorarse? Si, pero no, niña; nunca de un soñador viajero, nunca...
El café, a parte de las mujeres es de las pocas adicciones poéticas que conozco.
Soy tan tonto, que soy impredecible.
Dice mi perro que cuando vuelves, desde que te fuiste, no se separa de el vidrio helado de la ventana que da al patio, el patio por donde tu llegabas.
Andrea, me enseño que el hecho de que te dejen, puede impulsarte a ser mejor, eso y a no salir los viernes. Marcela, me enseño a no salir los demás días de la semana, y a ser fiel aunque el infierno se me venga abajo.
Ya descubrí el problema, soy mas pendejo que guapo, mala proporción.
Deja de regalarme palabras, niña, yo ya tengo demasiadas.
Bienvenido a la tercera cita.
Beber whisky viendo pelís.
Cada quien con sus fantasmas; yo, no pregunto por los tuyos si tu finges no ver los mios.
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