Pues en fin, el llanto que tomaba como tuyo
hoy, con una carta a mi abogado ausencia, le reclamo como mio,
que si he sido yo el culpable no queda ninguna duda,
y exijo los frutos de mi labor a tu lado.
Pase noches en vela, pensando como complacer
este instinto homicida que me ha orillado a acribillarte,
y después de comprar tu amor y tu confianza,
que costaron un millón de besos y promesas.
Me he quedado tan pobre que recurro a la limosna
que me ofrece la escritura,
aveces, hurto del bolsillo de mis acompañantes,
besos que no devuelvo ni con el ruido de un gracias.
He podido, no lo niego, tantas veces ganarme la vida,
como escritor de nuevos corazones y vuelos suicidas,
pero, la fatiga del amor que te cobraba
me ha rendido cuentas, en la que salgo debiendo fuerzas.
Hoy no me queda ni lo que llamabas,
"la fuerza de la costumbre disfrazada"
y me muero de hambre, como los llamados poetas,
que para ser sincero es muy a gusto mio.
Y como buen pobre, me siento devoto de un amor crucificado
al que juraba lealtad eternamente,
y por dos monedas he vendido a la infamia,
ahora busco que en castigo, mi codicia me ahorque.
Si, falte a mi palabra, lo acepto,
me he quedado sin fondos del amor prometido,
no se si por derrocharlo en cartas que no escribo
o jugar a la ruleta, rusa, con tus besos.
El caso del testimonio es el siguiente,
me declaro en banca rota para amores futuros,
si arriesgan su inversión en tan exhausto "individuo"
no prometo nada, mas lejos de las palabras.
Las mismas, que ayer formaban
un capital cercano, a los no se cuantos infinitos
y, que con especulaciones, casi logro lo inédito,
volverme mas rico derrochando a manos llenas.
Hoy, a decir verdad, busco la manera, en total quiebra,
de que alguien me de la confianza de un crédito cualquiera,
y no para empezar nuevos negocios,
sino solamente, para pagar la deuda.
En la que mis propios intereses me comen,
y desespera la presión del cobrador nostalgia,
al mismo que si son tan amables pueden decirle,
que no tengo ni un cinco, aunque si quiero pagarle.
Por eso mismo hoy me confieso en quiebra y te pido el llanto,
que sacando cuentas... es mio.
2 comentarios:
ESTUPIDO!
Me hiciste mariquear!
Tas viendo y no ves!
Vente a Vallarta por unas chelas!
Gracias por dejar tu comentario en mi blog!
Muy bueno el tuyo, andaré seguido por estos lados!
No pierdas el contacto :)
interesantes los escritos! son tuyos?
te dejo un beso,
espero volver a encontrarte entre comentarios.
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