SESIONES EN EL PARAÍSO

Clases de vuelo y rebotando por tu risa. No te veías bien, te veías magnifica. Y ya se, sueños dos por uno que vendes al mejor postor, al primer idiota que tropiece con tu voz. Mucho gusto, vine a incomodarle el día.  Decirle que no entiendo, ¿en serio? En serio para mi no hace falta nada si le robo una sonrisa. Me imagino la vida como me gusta vivirla, saber que no fue el momento ni el lugar y eso estropeo toda oportunidad de salvar la dignidad y reivindicar la suerte del pasado. Caí en el mismo lugar y estando usted presente me queda claro, que debí de saberlo y no tomar, para no empezar con estas crónicas de un enamoramiento mal iniciado. Caigo por su perfume, me desvelo en esos labios, coqueteos irrisorios y este distraído en vilo de un enamoramiento torpe. Saber que no y saber que eso lo hace tan magnifico, demasiado imposible para poder arruinarlo.